Costaba arrancar. Siempre el comenzar de nuevo le originaba un cosquilleo de márgenes abandonados a la deriva. Igual juntó fuerzas y decidió que esta vez las cosas iban a cambiar. Seria ella quien manejara los hilos y no los otros. Ya el tiempo de ser la cabeza rapada en el crudo invierno de la Siberia no entraba en esa nueva etapa. Que ironía- pensó y la panza le hacía ruidos.
Estas parada en el año 6 de tu vida, le dijo una amiga. Vas a tirar todo por la borda. Eso espero. Ponete algo azul, ese color te va a proteger. Y sino hacete una x en la nuca para que no te veas desbordada por el cumulo de negatividades externas.
No era mala idea- pensó mientras iba caminando sin rumbo fijo con la vista solo adhiriéndose a cuanto color se cruzara en el camino. Era el comienzo de sus vacaciones en la city. Las calles estaban cubiertas de insomnes cuerpos. Demasiadas lenguas chocando contra la humedad de Buenos Aires. Ver un cartel repetido en sucesivos bares exponiendo la frase clara y contundente “el baño solo para clientes”. Esa perspectiva mezquina le provocaba enfado, y ¿el que no tenia para tomarse un café y no aguantaba llegar a su casa para ir al baño?.
Le gustaba el desorden de matices entrando dentro de su ser, y así solía vestirse. Como si los arcanos sin ropajes impuestos se manifestaran de la manera más libre en cada longitud, arriba y abajo, viviendo en ella.
Tocó el aro de cristales que atravesaba su oreja. Uno solo, enredando el pelo largo. El rojo era su amuleto predilecto, no podía negarlo, era más fuerte que ella esa adicción. Quizás fuera la única lucidez que la alejaba de las pesadillas. Un vigía inyectando esa fuerza abrumadora. En varias ocasiones personas al verla toda de rojo mostraban cierta incomodidad desesperada. Si por ellos fuera le regalarían ropa configurada al estereotipo convencional. Cómo explicarles que su ropa interior también era roja. Salvo por la turmalina negra que rozaba su piel o la pirita que llevaba colgando a la vista de nadie.
AinchilClaudia- Poesía y narrativa
"En un mundo colmado de armaduras oxidadas, ser montaraz y no esclavo"
viernes, 19 de julio de 2019
sábado, 6 de abril de 2019
EL NEOLIBERALISMO EN EL SENTIMIENTO
a veces creo divisar
un frío tempano en algunos ojos
sin mirada original
o con mirada duplicada
el disfraz construido a medida
los fragmentos
esos aplausos huecos
de circos deambulando
por ciudades
siempre un lugar distinto
para no acostumbrarse
ser turista en el sentimiento ajeno
tomar para descartar
el neoliberalismo en el sentimiento
y se cae la venda de los ojos
era hora
tenía que caerse alguna vez
desconozco porque quedo
como estructura sin idioma
frente al viento
la oscuridad se huele
cuando los sapos saltan
en estampida y zumbidos
cuando el hombre olvida
y exprime lámparas
no hay diccionario donde hallar
lo que uno siente
ese desconcierto espacioso
la portezuela escondida
que no es puerta ni ventana
sólo agua entreabierta
oxidando postigos
en la carretera un nuevo amanecer
va dejando atrás exilios
cada curvatura fugaz
de tiempos idos.
un frío tempano en algunos ojos
sin mirada original
o con mirada duplicada
el disfraz construido a medida
los fragmentos
esos aplausos huecos
de circos deambulando
por ciudades
siempre un lugar distinto
para no acostumbrarse
ser turista en el sentimiento ajeno
tomar para descartar
el neoliberalismo en el sentimiento
y se cae la venda de los ojos
era hora
tenía que caerse alguna vez
desconozco porque quedo
como estructura sin idioma
frente al viento
la oscuridad se huele
cuando los sapos saltan
en estampida y zumbidos
cuando el hombre olvida
y exprime lámparas
no hay diccionario donde hallar
lo que uno siente
ese desconcierto espacioso
la portezuela escondida
que no es puerta ni ventana
sólo agua entreabierta
oxidando postigos
en la carretera un nuevo amanecer
va dejando atrás exilios
cada curvatura fugaz
de tiempos idos.
martes, 22 de enero de 2019
ES
un lugar escondido
descubrir los vestíbulos
buscados sin darte cuenta
es la orquesta que resuena dentro
como esas imágenes de verdad consecuencia
te descubren
te llaman
te deslizas
giras en silencio
a veces inclinando archivos
y estaciones recorridas
donde no se puede volver
no hay instrucciones en ese lugar
cada alma es su propio huracán
descubrir los vestíbulos
buscados sin darte cuenta
es la orquesta que resuena dentro
como esas imágenes de verdad consecuencia
te descubren
te llaman
te deslizas
giras en silencio
a veces inclinando archivos
y estaciones recorridas
donde no se puede volver
no hay instrucciones en ese lugar
cada alma es su propio huracán
sábado, 22 de diciembre de 2018
autofoto
autofoto de la vida en blanco y negro
del laberinto
de los lentes que son rojos
pero tornan en hambrientos monosílabos estéticos
de lo que envuelve migrando
del pájaro que son mis labios agrietados
que quieren vociferar melodías de amor
en un mundo de sombras
autofoto a solas
porque no tengo hambre
y hay intemperie
del laberinto
de los lentes que son rojos
pero tornan en hambrientos monosílabos estéticos
de lo que envuelve migrando
del pájaro que son mis labios agrietados
que quieren vociferar melodías de amor
en un mundo de sombras
autofoto a solas
porque no tengo hambre
y hay intemperie
martes, 16 de octubre de 2018
Cuando te perdoné
cuando te perdoné
otra vez
y otra vez
y otra vez
había trozos de vidrio corazón
en el rincón
ensimismados fantasmas
ahora me pregunto si fue sano
tanto perdón
mirar para el costado
tapar los oídos para no escuchar
esas vocecitas
traje maravilla
Heidi en su versión peligrosa
chicas superpoderosas
cierta noche el teléfono sonó como un testigo
de lo que le ocurre a la voz invasora
cuando pierde el sabor original
con tantos agregados químicos
a los que le falta el alma
tal vez fue la jauría de santos
de la infancia
la orden encubierta de clérigos y monjas
que grabaron a fuego
en mi espíritu
la ráfaga que oscila
el temblor
cierto crepúsculo de paredes huecas
ese mandato de poner la otra mejilla
cuando te perdoné
otra vez
y otra vez
y otra vez
no me perdoné a mí misma
por bajar la cabeza
entonces, la tiniebla
los vocablos mudos
saqueados
otra vez
y otra vez
y otra vez
había trozos de vidrio corazón
en el rincón
ensimismados fantasmas
ahora me pregunto si fue sano
tanto perdón
mirar para el costado
tapar los oídos para no escuchar
esas vocecitas
traje maravilla
Heidi en su versión peligrosa
chicas superpoderosas
cierta noche el teléfono sonó como un testigo
de lo que le ocurre a la voz invasora
cuando pierde el sabor original
con tantos agregados químicos
a los que le falta el alma
tal vez fue la jauría de santos
de la infancia
la orden encubierta de clérigos y monjas
que grabaron a fuego
en mi espíritu
la ráfaga que oscila
el temblor
cierto crepúsculo de paredes huecas
ese mandato de poner la otra mejilla
cuando te perdoné
otra vez
y otra vez
y otra vez
no me perdoné a mí misma
por bajar la cabeza
entonces, la tiniebla
los vocablos mudos
saqueados
sábado, 13 de octubre de 2018
Y LUEGO
el amor que no es amor
en tiempos de promo
se vende / alquila
hay quienes lo permutan
yo me resisto a destapar
botellas de plástico en serie
imposible nadar en el desierto
el alquitrán es denso
la Coca Cola afloja tornillos
pienso en cómo será aflojar
el amor
donde ubicar la ausencia.
Olvidé los puntos en las palabras
las intersecciones en las miradas
cuando me negaste
tres veces
y luego cantó el gallo
en tiempos de promo
se vende / alquila
hay quienes lo permutan
yo me resisto a destapar
botellas de plástico en serie
imposible nadar en el desierto
el alquitrán es denso
la Coca Cola afloja tornillos
pienso en cómo será aflojar
el amor
donde ubicar la ausencia.
Olvidé los puntos en las palabras
las intersecciones en las miradas
cuando me negaste
tres veces
y luego cantó el gallo
miércoles, 22 de agosto de 2018
DEL VIENTO
a veces está todo revuelto
hay mudanzas en las ropas
del ver y ser visto
el aire no tiene tanto oxígeno
como dicen los anunciantes
en el refugio sin milagros
de improviso la prosa es mirada cautiva
sin narrador
el poema no escrito se ha estancado
no provoca agitación
ni muerde
ni mastica
hace frío y el chocolate a la noche captura
como una sanguijuela
por si acaso el mundo se derrumbe
como tiembla la tierra
al parpadear
verdes pañuelos inundando el norte sur
este oeste
y en el centro
y en el costado
una gran luz se encendió
y serán más luces
cada árbol es una mano
cuando veo hambre
me duelen las entrañas
cuando no puedo más
hay mudanzas en las ropas
del ver y ser visto
el aire no tiene tanto oxígeno
como dicen los anunciantes
en el refugio sin milagros
de improviso la prosa es mirada cautiva
sin narrador
el poema no escrito se ha estancado
no provoca agitación
ni muerde
ni mastica
hace frío y el chocolate a la noche captura
como una sanguijuela
por si acaso el mundo se derrumbe
como tiembla la tierra
al parpadear
verdes pañuelos inundando el norte sur
este oeste
y en el centro
y en el costado
una gran luz se encendió
y serán más luces
cada árbol es una mano
cuando veo hambre
me duelen las entrañas
cuando no puedo más
Suscribirse a:
Entradas (Atom)